Uno mismo.

A veces, sin querer, nos castigamos. No nos gustamos y por eso dejamos de hablarnos, de escucharnos, de querernos.
¿De qué sirve "arreglarnos" con el mundo si no estamos satisfechos con lo que somos?
Es cierto que las personas que nos rodean, las situaciónes , los "problemas,  en ocasiones, nos hacen pequeños, pero..... ¿ Por qué ?
Necesitamos decir: ¡¡¡¡¡¡ Yo quiero ser grande ¡¡¡¡¡ Y para ser grandes nos tenemos que querer.
Tendremos que reconciliarnos con nosotros mismos para poder ayudar, para poder dar, para poder amar. Si no lo hacemos , nunca será posible.
Te invito a que crezcas creyendo siempre en tí y en tus posibilidades como ser humano. No nos prives de enriquecernos con tu talento. ¡¡¡¡¡ Ámate como otros te aman ¡¡¡¡¡ Danos ese regalo.